La Tradición Ocultista de Occidente tiene varias ramas: la masonería, los rosacruces, Thelema, los neotemplarios, la Magia del Caos, el luciferismo y el satanismo. El presente trabajo repasa dichas ramas, prestando atención a su origen y a su evolución.
LA MASONERÍA: La masonería o francmasonería actual parte de los canteros-albañiles medievales (“maçons” en francés) que construyeron las catedrales góticas, con maestría y mezclando elementos cristianos y paganos en la simbología. En el siglo XVII, la masonería medieval u operativa de los masones medievales comenzó a aceptar a personas ajenas a la profesión de albañil y ello significó el nacimiento de la masonería moderna o especulativa. Articulada en torno a las Constituciones de Anderson (1723) y a dos grandes corrientes, la tradicional de la Gran Logia de Inglaterra y la liberal del Gran Oriente de Francia, en el siglo XVIII dio vida en su seno a tres tendencias masónicas ya pertenecientes a la Tradición Ocultista de Occidente: Los Illuminati, el martinismo y la masonería egipcia de Cagliostro.
Los Illuminati de Baviera fueron fundados el 1 de mayo de 1776 por el catedrático alemán Adam Weishaupt (1748-1830) en Baviera. Weishaupt y Adolf von Knigge en seguida le dieron una impronta masónica a su organización al crear el Rito de Los Iluminados de Baviera, un rito masónico reconocido como tal, incluso, por autores tan prestigiosos como Aldo Lavagnini (Magíster). Hoy, las organizaciones que proceden de los Illuminati: Gran Logis Rockefeller 666, Orden Illuminati, Skull&Bones, los Shriners…, se definen como órdenes paramasónicas, por tratarse de organizaciones que recogen parte del legado del iluminismo masónico del siglo XVIII, sin asumir las Constituciones de Anderson ni mantener vínculos organizativos con la francmasonería.
Una segunda tendencia masónica que guarda relación con la Tradición Ocultista de Occidente es la citada
masonería egipcia, fundada por José Bálsamo Cagliostro (1743-1795). En 1785, Cagliostro instituyó el Rito Egipcio, del que parten todos los ritos egipcios de Memphis-Misraïm de la actualidad, y lanzó la masonería egipcia al mundo desde su Logia Madre, con gran éxito. Pero la excelente situación en seguida se vio ensombrecida por las persecuciones inquisitoriales. Detenido por la Inquisición, Cagliostro sufrió un calvario enorme hasta acabar estrangulado en sus calabozos en 1795.
Una tercera tendencia masónica que está ligada a la Tradición Ocultista de Occidente es el
martinismo, creado por Martines de Pascually (1710?-1774). De origen judío sefardí (español), justo lo contrario que Weishaupt, ya que éste descendía de judíos europeos, Martines recorrió Francia y se hizo iniciar en varios ritos masónicos del siglo XVIII, creando finalmente su propio rito, el Rito de los Elegidos Cohens. El rito fue reconocido por la Gran Logia de Francia en 1765 y supuso el inicio del martinismo. La Orden de los Elegidos Cohens del Universo tuvo templos en Burdeos, Montpellier, Foix, Versalles, Metz, París y otros puntos de Francia y Santo Domingo, y desarrolló una impronta masónica y ocultista. El iniciado coruñés Papus revivió el martinismo a finales del siglo XIX y, gracias a ello, hoy existen varias órdenes martinistas en diferentes partes del planeta: la Orden Martinista, la Orden Martinista Tradicional de AMORC, la Orden de los Caballeros Martinistas, entre otras.
LOS ROSACRUCES: Los rosacruces parten de un personaje mítico, Christian Rosenkreutz, y de una serie de obras tan interesantes como misteriosas de principios del siglo XVII que hablan de él: “Fama Fraternitatis”, “Confessio Fraternitatis” y “Boda alquímica de Christian Rosenkreutz”. Y, ciertamente, estas obras y el citado personaje fueron el detonante de la aparición de las primeras órdenes rosacruces del siglo XVIII, la Rosacruz del Oro y la Rosacruz del Antiguo Sistema, y sobretodo de dos tendencias rosacruces ligadas a la Tradición Ocultista de Occidente: la Golden Dawn y Thelema.
Así, la Golden Dawn fue fundada en el seno de la Gran Logia de Inglaterra para desarrollar e impartir los misterios de la tradición rosacruz, la magia, la alquimia, el ocultismo occidental, etc. En 1884, el doctor Wynn Westcott, forense y masón de Londres, adquirió un manuscrito cifrado y averiguó que contenía un rito masónico desconocido y la dirección de una adepta alemana, Anna Sprengel. Tras una dilatada correspondencia con la señora, Westcott anunció a la masonería inglesa la fundación de la Orden Hermética del Amanecer de Oro (Golden Dawn). La nueva orden no sólo se dedicó a las disciplinas ya enumeradas, sino que creó una tendencia rosacruz dentro de la Tradición Ocultista de Occidente, como ya hemos dicho. Hoy, diversas organizaciones iniciáticas u órdenes como BOTA, la Golden Dawn inglesa, la Golden Dawn francesa, o la Thelemic Golden Dawn, recogen el legado de la célebre Golden Dawn inglesa de finales del siglo XIX.
La otra tendencia de los rosacruces ligada a la Tradición Ocultista de Occidente es Thelema, la cual parte de una escisión en el seno de la Golden Dawn, liderada por el mayor mago y ocultista del siglo XX, el inglés Aleister Crowley (1875-1947). Nacido en el seno de una familia ultracristiana, Crowley se dedicó en su juventud a escalar montañas, escribir poesía y estudiar ocultismo en la Golden Dawn, donde fue iniciado un 18 de noviembre de 1898. Ya en 1900 tuvo un famoso problema en las logias de la Golden Dawn, lo cual supuso su expulsión, pero él no descansó hasta crear una nueva tendencia rosacruz en la Tradición Ocultista de Occidente, Thelema. En 1904, en el Cairo, Crowley recibió revelado el “Liber Legis” por parte de Aiwass, una entidad sobrenatural que le transmitió los principios de la Ley de Thelema. Y en 1907, fundó la Astrum Argentum, la orden que debía suplantar a la Golden Dawn y extender Thelema. Cabeza de la OTO (Ordo Templi Orientis) inglesa desde 1912 y responsable internacional de la misma desde 1922, extendió Thelema y la dio a conocer al mundo, al igual que su divisa “Haz lo que quieras, eso debe ser toda la Ley”. Alabado por artistas, músicos y filósofos, la tendencia rosacruz de Crowley (Thelema) tiene una gran presencia en la actualidad en diferentes campos. A nivel de organizaciones iniciáticas, la OTO, la SOTO (Societas Ordo Templi Orientalis), la Astrum Argentum, varios “Colegios de Thelema”, la Iglesia Gnóstico Católica, etc., siguen el culto de Thelema de manera más menos organizada.
Por esta tendencia rosacruz, se llega a la Magia del Caos, el luciferismo y el satanismo, aunque antes de abordarlos detenidamente conviene señalar que las organizaciones templarias de la línea thelémica citadas y otras organizaciones neotemplarias modernas, en casos puntuales, también pertenecen a la Tradición Ocultista de Occidente. Cabría citar aquí a la Militia Templi, a los Templarios de Chipre, al Gran Priorato de Egipto, al Gran Priorato de Suiza, a los Caballeros de la Alianza Templaría.
MAGIA DEL CAOS, LUCIFERISMO Y SATANISMO: Inspirándose en Thelema y en Aleister Crowley, grandes iniciados de la Tradición Ocultista de Occidente dieron vida ya en el siglo XX a tres nuevas ramas de la misma: la Magia del Caos, el Satanismo y el luciferismo. La Magia de Caos parte de una arista y ocultista de notable categoría, Austin Osman Spare (1886-1956), que perteneció a la Astrum Argentum y otras organizaciones iniciáticas como la Golden Dawn y la brujería. A.O.S. escribió libros interesantes, “Anatema os Zos” y “Grimoire of Zos Kia Cultus”, y dio importancia a la magia sexual, a la Magia del Caos, donde el mago debe crear la realidad partiendo del Caos, y a la figura del Baphomet. La Orden del Caoísmo más famosa de nuestro tiempo es los Illuminates of Thanateros.
El satanismo actual, por su parte, fue creado por Antón Szandor La Vey (1930-1997), quien fundó la Iglesia de Satán el 1 de mayo de 1966 en California, EEUU. Esta nueva rama de la tradición Ocultista de Occidente es atea y utiliza la figura de Satán en sus rituales para liberar a los adeptos de sus tabúes y sus limitaciones impuestos por la moral convencional. Las organizaciones satánicas y lavelyanas de mayor entidad son la citada Iglesia de Satán, la Iglesia de la Fraternidad Satánica, la Orden del Templo de Satán, la Orden del Chivo Negro, los Illuminati os Satan… Finalmente, el luciferismo, la tercera rama de la parte más moderna de la Tradición Ocultista de Occidente, desde las masonerías ocultitas de finales del siglo XIX y creencias milenarias que se pierden en la noche de los tiempos o parten del mundo clásico, también aparece en órdenes iniciáticas. Éste presenta a Lucifer, Baphomet, como el “portador de la Luz” y aboga por la búsqueda de la misma, a través del estudio y la práctica de disciplinas iniciáticas. Entre las órdenes luciferinas actuales, cabe destacar a la Orden Illuminati y al Templo de Set del norteamericano Michel A. Aquino (1946-…).
Es interesante aclarar que el satanismo y el luciferismo tienen en su seno tendencias. Por ejemplo, el luciferismo se divide en luciferismo y luciferismo monoteísta o luciferianismo. El primero observa a lucifer como ángel que “porta la luz”, mientras que el segundo cree que Lucifer, Baphomet, etc… es el propio dios. La tradición Ocultista de Occidente posee diversas ramas, que van desde la masonería al satanismo moderno. Todas ellas ofrecen una ruta iniciática para los esforzados.
Fuente: Thelema en México